DESCRIPCIÓN.
La familia de los curculiónidos (gorgojos) está formada por miles de especies distribuidas por todo el mundo. Los insectos adultos se caracterizan por tener un rostro prolongado y antenas claviformes y geniculadas, trocántedes
muy alargados y la superficie ventral del mentón con seta prominente o un penacho de cerdas. El rostro de la hembra es más largo que el del macho, ya que tiene como misión excavar un edificio en la bellota, donde depositará los huevos. El cuerpo está cubierto de escamas de coloración generalmente oscura pero muy variable.
Las larvas son eruciformes, ápodas y se alimentan de frutos de castaños, encinas, robles y avellanas. Las larvas pasan por cuatro o cinco estadios y después pupan en el suelo o en el interior de las bellotas para emerger como adultos en el siguiente año.
CICLO BIOLÓGICO.
El ciclo biológico dura de 1 a 3 años. La hembra adulta realiza un agujero en el fruto con ayuda de su trompa y deposita en el interior un huevo que luego tapa con una sustancia cérea. La eclosión se produce a los pocos días y la larva joven camina en el interior de la pulpa de la bellota. El desarrollo larvario dura de 1 a 2 meses.
Los frutos afectados caen al suelo antes de tiempo y es aquí donde la larva, después de haber realizado un agujero de salida, se entierra a pocos centímetros de profundidad, fabricándose un pequeño habitáculo con tierra aglutinada. El insecto entra en diapausa hasta la siguiente primavera.
Durante el mes de mayo y los primeros días del mes de junio, dependiendo de las condiciones climáticas, inician la pupación, que dura entre 10 y 12 días.
En e[ norte de España este insecto es muy común, comienza la puesta a finales de agosto y se prolonga durante el mes de septiembre. Cada hembra pone alrededor de unos 20 huevos, generalmente sólo uno por
fruto.
DAÑOS.
Los daños que causa este insecto son importantes, ya que llegan a destruir por completo la cosecha de bellotas; el tamaño de las bellotas secas se reduce en un 60%. En otras zonas de España ataca también a los frutos del castaño y el avellano, donde las pérdidas económicas son muy cuantiosas. Los frutos son inservibles para el consumo en fresco y, en los casos específicos de la castaña y de la avellana, el coste de preparación de productos derivados aumenta.
Por otra parte los frutos afectados por la presencia de este insecto son más susceptibles a un posterior ataque de hongos fitopatógenos.
MÉTODOS DE CONTROL.
En España se han realizado distintos ensayos con insecticidas con persistencias prolongadas para el control de este insecto. Los resultados han sido desiguales y siempre han interferido de forma importante en la fauna auxiliar. En la actualidad sólo se tratan mediante tratamientos terrestres campos de cultivo de avellanos, y en contadas ocasiones, algunos castaños para producción de frutos. Un muestreo al azar de frutos usando redes bajo los árboles en el campo estima el porcentaje de los atacados por árbol y por lugar. La eliminación de estos frutos impide que las larvas salgan de los mismos para refugiarse durante el invierno en el suelo. |
Enrique Martín Bernal
Ing. Téc Forestal
D.G.A.-Unidad Sanidad Forestal. Zaragoza
FICHA Nº13 GORGOJO PERFORADOR DE FRUTOS, Curculeo elephas Gyll. Coleóptero de Fam. Curculionidae. |